Epic Games anunció que, a partir de diciembre, los creadores de islas en Fortnite podrán vender objetos dentro de sus propias islas, abriendo una nueva vía de monetización en el popular battle royale.
Los objetos podrán ser consumibles (como potenciadores) o duraderos (armas o cosméticos), aunque permanecerán restringidos a la isla del creador que los vende y no podrán usarse en el resto del juego.
Epic confirmó que hasta finales de 2026, los desarrolladores recibirán el 100% del valor en V-Bucks de las ventas dentro de sus islas. A partir de 2027, el porcentaje se reducirá al 50%, medida que la compañía justificó para cubrir costos de servidores, seguridad, moderación e I+D, afirmando que en los últimos años ha estado operando con pérdidas.
Epic explica que el “valor en V-Bucks” se calcula tras deducir las comisiones de las plataformas y tiendas, lo que en la práctica significa que los creadores recibirán alrededor del 74% del dinero gastado por los jugadores en V-Bucks durante el período de reparto del 100%.
Además de vender ítems, los creadores podrán invertir en visibilidad pagando para que sus islas aparezcan en una nueva sección llamada Sponsored Row dentro del menú Discover. Epic aclaró que el 100% de los ingresos generados por esta fila promocionada también se destinarán al fondo de creadores hasta 2026, reduciéndose al 50% a partir de 2027.
Actualmente, los desarrolladores ya reciben pagos a través del engagement pool, un fondo alimentado con el 40% de los ingresos netos de la tienda de Fortnite y compras relacionadas. Dichos pagos se calculan en función de métricas como minutos jugados, retención de usuarios, jugadores nuevos o que regresan, y la actividad de gasto en V-Bucks vinculada a la isla.
Desde que se presento la posibilidad de crear islas personalizadas, los jugadores han invertido más de 11.200 millones de horas en 260.000 islas creadas por la comunidad, generando hasta ahora $722 millones en pagos a los creadores.
Con esta nueva medida, Epic busca ampliar las oportunidades de negocio dentro del ecosistema Fortnite, consolidando aún más el papel de sus creadores como pieza clave del futuro de la plataforma.

