Después de semanas de silencio tras el despido de más de 9,000 empleados en julio —incluyendo cierres de estudios y cancelaciones en Xbox—, Satya Nadella, CEO de Microsoft, rompió el silencio.
A través de una carta enviada a empleados, Nadella evitó usar directamente la palabra “despidos”, pero confirmó la situación: “Hemos llevado a cabo despidos”, dijo, en medio de una reflexión sobre el “enigma del éxito”.
Según Nadella, Microsoft está en un momento fuerte a nivel financiero y estratégico. Sin embargo, justificó los recortes como parte de una oportunidad para que la compañía “se remodelara, liderara y tuviera un impacto mayor que nunca”.
El CEO también habló sobre el rol central que la inteligencia artificial jugará en el futuro de la empresa, sugiriendo que muchas funciones podrán ser reemplazadas por herramientas de IA capaces de asistir a miles de millones de personas como investigadores, analistas o desarrolladores.
En sus palabras:
“Quiero expresar mi sincera gratitud con aquellos que se fueron. Sus contribuciones han dado forma a quienes somos como compañía.”
Mientras Microsoft se enfoca en IA como su próxima gran apuesta, la comunidad gamer observa con preocupación cómo decisiones internas siguen afectando a Xbox y a los desarrolladores detrás de importantes franquicias.