En menos de un mes, Tesla habría pasado de promocionar Dojo como el futuro de su inteligencia artificial, a cerrar discretamente el proyecto, según reportes de Bloomberg.
Elon Musk, en la llamada de ganancias del 23 de julio, hablaba con entusiasmo sobre Dojo 2, Dojo 3, y una futura “fábrica de IA” para entrenar redes neuronales de conducción autónoma y al robot Optimus. Pero ahora, fuentes indican que el líder del proyecto Peter Bannon dejó Tesla, junto a parte del equipo que se fue a una nueva startup llamada DensityAI, y el resto fue reasignado internamente.
La rapidez del cambio ha generado confusión. Críticos cuestionan si Musk exageró deliberadamente el estado del proyecto para mantener la narrativa de avance tecnológico, en medio de un momento difícil para las ventas de autos de Tesla.
No sería la primera vez. Musk prometió autonomía total en 2016 “en tres años”, y aún no se ha logrado. El patrón de hiperoptimismo seguido por giros abruptos ha generado escepticismo constante, y el caso de Dojo podría sumarse a esa lista.
Por ahora, Tesla no ha emitido comentarios oficiales.