Según un reporte exclusivo de The Washington Post, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se prepara para firmar la próxima semana una orden ejecutiva que podría tener un impacto drástico en el mercado de drones en Estados Unidos, especialmente para los fabricantes chinos como DJI y Autel.
La orden no establece un veto directo, pero sí exige al sistema de inteligencia estadounidense acelerar las revisiones de seguridad nacional sobre estas marcas. Si una agencia no completa su revisión a tiempo, los productos quedarían automáticamente vetados del mercado estadounidense.
Paradójicamente, DJI ha solicitado previamente este tipo de revisión formal, buscando demostrar que sus drones no representan una amenaza a la seguridad nacional. Con esta medida, podría abrirse una oportunidad para limpiar su nombre… o sellar su destino.